Con modificaciones, el proyecto de ley que incorpora al sistema electoral argentino la Boleta Única de Papel, ahora vuelve a Diputados.
Como era de esperar, el Senado de la Nación aprobó, con modificaciones, el proyecto de ley que incorpora la Boleta Única de Papel al sistema electoral argentino. Esta iniciativa, que ya había sido propuesta durante el gobierno de Cambiemos, obtuvo 39 votos a favor y 30 en contra. Ahora deberá volver a la Cámara de Diputados, que decidirá si acepta o no la nueva redacción.
Entre los cambios más relevantes se destaca la eliminación del casillero en blanco para votar por lista completa, uno de los reclamos principales de los partidos provinciales. Además, el proyecto adelanta las elecciones PASO a la primera semana de agosto, ajustando así otros plazos del calendario electoral, como el inicio de la campaña.
El debate comenzó después de las cuestiones de privilegio. Los senadores que apoyaron el proyecto subrayaron la simplicidad, sustentabilidad y economía de la Boleta Única. El senador entrerriano Edgardo Kueider, cercano al gobierno de Javier Milei, explicó: “El objetivo es fortalecer la democracia, no pensar en la conveniencia de un candidato o sector político”. También afirmó que la boleta única es fundamental para que toda la oferta electoral esté garantizada en el cuarto oscuro.
Mónica Silva, senadora por Juntos Somos Río Negro, defendió el proyecto, resaltando su relevancia para las próximas elecciones y el esfuerzo por alcanzar consensos entre los distintos bloques. Según Silva, las modificaciones al proyecto fueron producto de amplios diálogos, y aseguró que el texto actual es el adecuado para avanzar hacia un sistema de votación más moderno y transparente.
Desde la UCR, Maximiliano Abad señaló que la Boleta Única mejora la participación ciudadana y fortalece la confianza en las instituciones. Por su parte, Guadalupe Tagliaferri del PRO afirmó que, aunque el proyecto no es perfecto, tiene el consenso necesario.
El oficialista jujeño Ezequiel Atauche destacó que, a pesar de estar en el gobierno, siguen apoyando la Boleta Única porque creen que es lo más transparente y democrático. La cordobesa Alejandra Vigo añadió que este sistema busca mejorar la calidad democrática, sin favorecer a un partido en particular, y recordó que ya ha sido implementado con éxito en algunas provincias.
Sin embargo, hubo críticas. Daniel Bensusan, de Unión por la Patria, argumentó que el sistema electoral argentino ha garantizado elecciones limpias y gobernabilidad. A su vez, Fernando Salino consideró que no hay interés popular en cambiar a la Boleta Única, subrayando que el sistema actual ha funcionado bien incluso para partidos con menos estructura. La riojana Florencia López advirtió que la Boleta Única puede debilitar a los partidos políticos, y que el sistema actual es lo único que funciona bien en el país.
La media sanción de este proyecto se votó en junio de 2022, y si no se trata antes de febrero próximo, caducará. Sin embargo, el gobierno está apurado por implementar estos cambios para las elecciones del año siguiente.