Más de 4,000 deportados llegaron a México desde Estados Unidos entre el 20 y el 26 de enero, sin un aumento significativo desde la llegada de Trump. La presión sobre países como Colombia también crece.
Entre el 20 y el 26 de enero, Estados Unidos deportó a 4,094 personas a México, la mayoría de ellas de nacionalidad mexicana, aunque también hubo deportados de otros países, según informó la presidenta Claudia Sheinbaum. No obstante, Sheinbaum destacó que no ha habido un “incremento sustantivo” en las deportaciones desde que Donald Trump asumió la presidencia.
En medio de la implementación de las políticas antimigración de Trump, Reuters reportó que México rechazó una solicitud de Washington para que un avión militar estadounidense aterrizara en territorio mexicano para deportar migrantes. La presidenta aseguró que, en los últimos días, México recibió cuatro vuelos civiles con deportados, los cuales llegaron en coordinación con el gobierno de Estados Unidos, siempre respetando la soberanía del país.
Sheinbaum también mencionó que, en el caso de personas que no son mexicanas, existe una comunicación previa entre México y los gobiernos de los países de origen, especialmente los de Centroamérica, para coordinar las deportaciones. Finalmente, la mandataria calificó de “positivo” el acuerdo alcanzado entre Colombia y Estados Unidos, después de las amenazas de Trump de imponer sanciones a Colombia si no aceptaba recibir a migrantes deportados.
