Otras seis personas murieron en dos ataques contra embarcaciones en el Pacífico, mientras crecen las críticas al despliegue militar ordenado por Donald Trump. La ONU advierte sobre “indicios de ejecuciones extrajudiciales” y América Latina exige respeto al derecho internacional.

Estados Unidos bombardeó otras dos presuntas “narcolanchas” en aguas internacionales del Pacífico, dejando seis muertos, según confirmó el secretario de Defensa, Pete Hegseth. Los operativos, parte de una amplia ofensiva naval impulsada por el presidente Donald Trump, elevan a 76 las víctimas fatales desde el inicio de la campaña. La ONU denunció que los ataques podrían constituir violaciones al derecho internacional, mientras que la cumbre Celac–Unión Europea, reunida en Santa Marta, reclamó el “pleno cumplimiento del derecho internacional” en las acciones contra el narcotráfico.
El investigador Peter Kornbluh, del Archivo de Seguridad Nacional de EE.UU., advirtió que esta escalada busca “enviar un mensaje de fuerza a Caracas” y preparar “las bases ilegales para un cambio de gobierno en Venezuela”. Según explicó, los ataques no persiguen un objetivo real de combate al narcotráfico, sino una demostración de poder militar en la región. La operación, que cuenta con ocho buques de guerra, tres anfibios, un submarino y el portaaviones Gerald R. Ford, es considerada el mayor despliegue naval estadounidense desde la Guerra del Golfo.
El alto comisionado de la ONU, Volker Turk, pidió investigar los hechos al señalar que existen “fuertes indicios de ejecuciones extrajudiciales”. En paralelo, una moción demócrata para limitar los poderes de Trump en aguas internacionales fue rechazada por el Senado. En América Latina, mandatarios como Gustavo Petro y Luiz Inácio Lula da Silva condenaron los ataques y alertaron sobre “el regreso de las intervenciones militares en la región”. Analistas regionales advierten que Washington busca reinstalar la lógica del control militar en el Caribe, mientras refuerza su presencia terrestre en Panamá con ejercicios en la base aeronaval Cristóbal Colón.

