El incremento de casi un 5% en los precios de los combustibles a partir de abril preocupa a los empresarios estacioneros ante la caída en las ventas. La demanda cayó 16% promedio desde diciembre del 2023 a febrero pasado
A partir del primero de abril, los precios de los combustibles experimentarán un aumento cercano al 5% en todas las estaciones de servicio de Argentina. Esta medida ha generado inquietud entre los empresarios estacioneros debido a la preocupante disminución en las ventas en los surtidores.
El incremento obedece a la entrada en vigor de una nueva actualización del Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y el Impuesto al Dióxido de Carbono (IDC), que el Gobierno nacional ha decidido ajustar mensualmente hasta regularizarse en el tercer trimestre de 2023. Se ha establecido un esquema para trasladar los cargos tributarios pendientes desde el tercer trimestre de 2021 hasta el mismo período de 2023, quedando pendientes los ajustes correspondientes a abril y mayo próximos. A partir de junio, se prevé la implementación de un nuevo esquema de actualización del ICL y IDC por parte del Ministerio de Economía y la Secretaría de Energía.
En el último aumento, que promedió un 7,5% en todo el país, la actualización por impuestos representó un 4,4%, mientras que el resto del incremento se atribuyó al alza de los biocombustibles, la variación del tipo de cambio y el precio del crudo internacional.
Para el próximo mes de abril, se estima que el aumento mínimo en los precios de los combustibles será del 4,2%, promediando cerca del 5% en todo el país. Sin embargo, no se descarta que factores como el encarecimiento de los biocombustibles, la devaluación mensual del 2% o la escalada del crudo internacional puedan llevar este aumento al 9% en promedio. Ante esta posibilidad, fuentes gubernamentales han admitido que podrían considerar postergar o escalonar la actualización prevista para abril hasta junio, con el objetivo de contener la inflación. Esta medida se resolverá en la víspera de Pascuas.
La Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (Cecha) prevé que el incremento en los precios de la nafta súper sea de alrededor de $30 y de $20,39 en el caso del Gasoil Grado 2.
Esta constante subida de precios ha generado una marcada preocupación entre los estacioneros, quienes han observado una disminución significativa en las ventas. Desde diciembre de 2023 hasta febrero pasado, se registró un promedio de caída del 16% en la demanda de combustible en todo el país, siendo aún más pronunciada en el caso de las versiones Premium, que alcanzaron hasta un 23% menos de demanda. Esta situación ha llevado a muchos automovilistas a optar por la nafta Súper en lugar de la Premium, a pesar de que esto no es recomendable para algunos tipos de motores.
En resumen, el panorama se presenta desafiante tanto para los consumidores como para los empresarios del sector de los hidrocarburos, quienes continúan enfrentando los impactos económicos de estas constantes subidas en el precio de los combustibles.
