La intervención económica de Estados Unidos en Argentina y la nueva forma de dependencia e imperialismo que inaugura, la crisis política y electoral del oficialismo y la aparición de Santilli como una borrosa esperanza en un marco de fragilidad económica y social; por Martín Gambarotta.
La política tradicional considera clave saber manejar los tiempos. Las centrales con oficinas en Washington que monitorean la situación en Argentina desde siempre no fallaron en ese sentido. Había que moverse rápido para rescatar al gobierno del Presidente libertario Javier Milei antes que sus problemas de liquidez monetaria hicieran volar todo por los aires. La administración del Presidente Donald Trump mostró su dinero el jueves. El Tesoro de los Estados Unidos compró pesos. El Secretario del Tesoro Scott Bessent confirmó públicamente el canje de monedas por 20.000 millones de dólares. El dólar en Argentina seguirá flotando entre bandas bajo la supervisión del Fondo Monetario Internacional (FMI), dijo Bessent. Así, confirmó que la administración Trump hará “todo lo que sea necesario” para sostener a Milei hasta las elecciones de medio término del 26 de octubre.
Bessent habló después de su anuncio: el fondo de estabilización del Tesoro estadounidense no pierde dinero con la operación porque el peso está barato. Argentina, según el secretario, dio certezas de que se sacará de encima a China. Bessent dijo que la decisión fue política, hay que respaldar a los gobiernos de derecha en el continente y Argentina es clave. Los “estados fallidos” como Venezuela son “liderados por China”, según Bessent.
Para los mercados, la labia de Bessent es música: bajaron el dólar y el riesgo país.
Trump así demuestra que poco le importa esa premisa diplomática que dice que un estado no se entremete en los asuntos internos de otro estado soberano. (…) Si este acuerdo es la confirmacin del nacimiento de una nueva forma de imperialismo, tal vez dispare acciones antiimperialistas más nítidas, que hasta hace poco sonaban trilladas, en el campo democrático.
El tema es que Argentina tiene también un canje de monedas activo con China. Guillermo Francos, el jefe de Gabinete, negó que se caiga el acuerdo monetario con China. “No creo que parte del acuerdo sea excluir a China”, dijo Francos.
Trump así demuestra que poco le importa esa premisa diplomática que dice que un estado no se entremete en los asuntos internos de otro estado soberano. Hay que recurrir a consignas de otra era para explicar la situación: Patria sí, colonia no; liberación o dependencia; yanquis go home.
Son artefactos verbales que ahora adquieren un significado fresco. Si este acuerdo es la confirmación del nacimiento de una nueva forma de imperialismo, tal vez dispare acciones antiimperialistas más nítidas, que hasta hace poco sonaban trilladas, en el campo democrático.
Al final, los que veían la mano de los Estados Unidos en las convulsiones del país durante un siglo no eran tan paranoicos.
Bessent dijo que los libertarios tienen buenas posibilidades de ganar las elecciones, algo que es discutible. La Libertad Avanza, el partido de Milei, viene de perder las elecciones distritales en la provincia de Buenos Aires por 14 puntos a manos de un peronismo unido. La administración Trump sueña con que Milei construya consensos para lanzar la segunda etapa de su mandato y acumular reservas.
No está claro si el Tesoro de Bessent seguirá comprando pesos si los libertarios llegan a perder las elecciones. Hay presiones porque Trump está lidiando con el cierre del gobierno en Estados Unidos.
Milei cometió un error descomunal cuando ungió personalmente al economista neoliberal José Luis Espert como primer candidato a diputado en la provincia de Buenos Aires.
Washington sabe manejar los tiempos, no así su ahijado Milei.
Espert fue vapuleado por las acusaciones que lo vinculan con un aporte de 200.000 dólares hecho por un supuesto narco, Fred Machado. Milei y Espert se pasaron el fin de semana tratando de sostener la candidatura cuando era evidente que era insostenible por la presión mediática. Espert, que había intentado construir una imagen de candidato vigilante, inauguró el juego de las lágrimas cuando lloró durante una entrevista radial y acusó a Juan Grabois, candidato a diputado peronista en la provincia, de meterse con su familia. Fue Espert el que en su momento insultó en público a la hija de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Milei en una entrevista tuvo un momento revelador: dijo que él era personalmente responsable del arresto de Fernández de Kirchner, lo que aumentó las sospechas de la manipulación política del caso.
Espert recién se bajó a destiempo el domingo cuando las encuestas mostraban un derrumbe de la Libertad Avanza en la provincia.
Así se selló el acabose de la carrera de Espert. El economista vigilante además renunció a la presidencia de la Comisión de Presupuesto en la Cámara de Diputados y pidió licencia como legislador hasta el fin de su mandato en diciembre. Un juez fue habilitado por la Cámara para allanar la casa de Espert en Beccar y sus despachos en el Congreso.
El periodismo amigo del gobierno, que se cree en condiciones de funcionar como una especie de consejo asesor en las sombras del presidente, se angustió con una situación: las boletas únicas de papel en la provincia de Buenos Aires ya impresas llevan la foto del desgraciado Espert. Estos periodistas, que ahora luchan por controlar su desesperación, de verdad creen que pueden torcer la realidad. Hubo ruegos para que se vuelvan a imprimir las boletas como si la cara de Espert, sospechado de narco, no estuviera ya grabada negativamente en la cabeza de los votantes del conurbano por sus conexiones con narcos.
Todo se volvió más claro: el emblema de Fuerza Patria, el peronismo, es una bandera argentina. El candidato libertario ahora es Trump y sus dólares, no es una fórmula que necesariamente pegue bien entre los que votan en la provincia más grande del país.
Hasta ahora los esfuerzos judiciales de la Libertad Avanza para imprimir otra vez las boletas no prosperaron. Tampoco queda claro quién encabeza la lista sin Espert en carrera. La segunda candidata en la lista es Karen Reichardt, una exvedette con poca experiencia política. El tercero en la lista es Diego “El Colo” Santilli, un político experimentado que pertenece al partido de centroderecha PRO liderado por el expresidente Mauricio Macri. Santilli, que comenzó su carrera como punterito menemista durante el Consenso de Washington, todavía no ganó la contienda en los tribunales para encabezar formalmente la lista libertaria.
El peronismo lanzó una idea: que los libertarios pongan una foto de Trump si se vuelve a imprimir la lista. Todo se volvió más claro: el emblema de Fuerza Patria, el peronismo, es una bandera argentina. El candidato libertario ahora es Trump y sus dólares, no es una fórmula que necesariamente pegue bien entre los que votan en la provincia más grande del país.
Después de la renuncia accidentada de Espert, el presidente trató de huir para adelante encabezando un acto en el Movistar Arena de la Ciudad de Buenos Aires para lanzar su libro el lunes. Milei cantó algunos temas clásicos del rock nacional con una banda que tenía a uno de sus diputados como baterista y a otra haciendo coros.
La movida de Bessent tiene el apoyo de Kristalina Georgieva, la directora del FMI. Georgieva dijo que el éxito de las severas medidas de austeridad de Milei dependen del apoyo de la gente. Ahí puede haber un problema: los capos de las finanzas mundiales todavía creen que Milei tiene el músculo político para sostener el ajuste con apoyo popular cuando eso ahora está claramente en duda.
La ambición de Milei siempre fue clavar el último clavo en el ataúd del kirchnerismo, pero con su actuación tal vez haya certificado la muerte definitiva del rock. Expresado en términos de la tribu: esto ya no es rock.
Así Milei, en el peor momento de su popularidad, montó un espectáculo partidario en un estadio colmado para lanzar un libro que, según él, explica su “milagro”.
El acto disparó sutilezas en la interna libertaria que tal vez terminen siendo significativas en el futuro, las elecciones presidenciales de 2027. Milei le dio pista durante el acto a la agrupación Las Fuerzas del Cielo que había sido humillada en el reparto de candidaturas manejado por Karina Milei, la hermana del presidente. Karina Milei y sus armadores perdieron poder con la derrota de septiembre.
En el Movistar Arena volvió a subir el perfil Daniel Parisini, el Gordo Dan, un dirigente de Las Fuerzas del Cielo que había sido repudiado cuando hace poco acusó al Senador aliado Luis Juez de utilizar a su hija con parálisis cerebral con fines políticos.
Las imágenes del concierto no cayeron del todo bien en algunos sectores políticos de Estados Unidos. La oposición a Trump lo acusó de estar regalándole dinero a un payasín. “Donald Trump le dio 20.000 millones de dólares a este idiota”, dijo el escritor Don Winslow después de ver las imágenes del concierto.
Una senadora demócrata, Elizabeth Warren, presentó un proyecto para prohibir el apoyo financiero a Argentina por parte del fondo de estabilización del Tesoro durante el mandato de Milei.
El proyecto de Warren eliminaría la facultad de la administración Trump para brindar apoyo financiero unilateral a Argentina durante el mandato del presidente libertario. Prohibiría al secretario del Tesoro utilizar el FSE para brindar asistencia financiera directa o indirecta a Argentina, incluyendo el uso de líneas de canje de divisas, compras de divisas o deuda soberana, o préstamos directos.
Warren, según Bessent, es una “peronista americana”. Una diputada libertaria dijo que Warren era una “kuka del norte”. Con este salvataje intervencionista sin precedentes la política doméstica de Estados Unidos de pronto se vuelve relevante a nivel local. Hay que medir la candidatura de Warren en La Matanza.
Por ahora, la manija la tiene Bessent; el secretario admitió que Argentina sufre un serio problema de liquidez y por eso salió al rescate. De hecho, el Tesoro argentino se estaba quedando sin fondos en su lucha para que el dólar no se escape del techo de la banda.
Hay un crítico estadounidense más: el Premio Nobel de economía Paul Krugman que acusó al jefe del Tesoro de su país de salir a salvar a “sus amigos que hicieron malas apuestas en Argentina”.
Krugman pronosticó que el nuevo plan no funcionará. Para los senadores demócratas, “los fondos de cobertura, incluyendo algunos multimillonarios con vínculos políticos con la administración Trump, han invertido grandes cantidades en Argentina en los últimos años. El apoyo financiero del Tesoro ofrece una posible vía de escape y ayuda a los fondos de cobertura a limitar las pérdidas al vender sus inversiones”.
La movida de Bessent tiene el apoyo de Kristalina Georgieva, la directora del FMI. Georgieva dijo que el éxito de las severas medidas de austeridad de Milei dependen del apoyo de la gente. Ahí puede haber un problema: los capos de las finanzas mundiales todavía creen que Milei tiene el músculo político para sostener el ajuste con apoyo popular cuando eso ahora está claramente en duda. El presidente tuvo problemas durante sus visitas proselitistas a Tierra del Fuego, Mar del Plata y Mendoza. Milei trató de hacer pie en San Nicolás el viernes donde dijo que el acuerdo con Trump es un hito “fundacional de esta era”. También anunció una reforma laboral y tributaria. El presidente lanzó el “Plan Argentina grande otra vez”.
Georgieva, mientras tanto, se permitió especular que este podría ser el último programa del FMI para Argentina.
Hay muchas cuestiones que no están claras. ¿Qué pasa si la Libertad Avanza no gana las elecciones? Trump le extendió un cheque a un plan económico que hace que la mayoría de la población argentina no llegue a fin de mes. Las paritarias están pisadas. La inflación en la Ciudad de Buenos Aires midió 2,2% en septiembre. Milei y los comunicadores amigos del gobierno insisten con que la inflación está bajando, pero técnicamente está subiendo.
La pregunta es si los consultores de Trump, algunos de los cuales están en Buenos Aires, ahora asesoran directamente a la administración libertaria en otro caso de injerencia por parte de los Estados Unidos en los asuntos internos del país. “Plan Argentina grande otra vez” suena a un producto parido en un laboratorio del Departamento de Estado.
Es una historia conocida: Washington cree controlarlo todo con dólares y agencias espías, pero no controla el voto popular. No se sabe cómo va a reaccionar Trump si la mayoría vota a favor de la banderita argentina de Fuerza Patria en la provincia de Buenos Aires.
Mientras, un consultor encumbrado de Trump se reunía en Buenos Aires con Santiago Caputo, el asesor estelar de Milei. La sensación es que la administración Trump se comporta como si hubiera iniciado una compleja operación inmobiliaria para comprar Argentina. Muchos asesores le dicen a Milei que tiene que salir en busca de consenso después de las elecciones. Lo que puede haber es un copamiento del Gabinete por parte de Macri a cambio de apoyo parlamentario. La pregunta es si los consultores de Trump, algunos de los cuales están en Buenos Aires, ahora asesoran directamente a la administración libertaria en otro caso de injerencia por parte de los Estados Unidos en los asuntos internos del país. “Plan Argentina grande otra vez” suena a un producto parido en un laboratorio del Departamento de Estado. El plan se combina con el anuncio de grandes inversiones en el país por empresas de Inteligencia Artificial de punta.
Milei hace rato que perdió el control del Congreso. La Cámara de Diputados aprobó el proyecto que restringe el uso de los Decretos de Necesidad y Urgencia. Una modificación votada en particular hace que el proyecto vuelva al Senado para su aprobación final.
Es discutible, pero las turbulencias actuales parecen haber comenzado cuando la inflación midió 3,7% en marzo. Ahí fue cuando Milei intentó huir hacia adelante terminando parcialmente con el cepo cambiario y flotando el dólar. Ahora esta semana sucedió algo similar, muchos economistas libertarios fanáticos hablaron abiertamente de una dolarización en otro intento de buscar una salida de emergencia para lo que hasta ese momento era una caída en espiral.
Está claro que Trump le está prestando atención a la región. Trump y Milei tienen agendado reunirse en la Casa Blanca el martes. Bessent dijo que no quiere que Argentina se transforme en otra Venezuela. El Premio Nobel de la Paz otorgado a María Corina Machado, la líder opositora venezolana, le inyecta más tensión al panorama regional. Machado le dedicó su premio a Trump. Para la alianza La Libertad Avanza-PRO, la situación en Venezuela es un asunto de la campaña.