El acto se realizó en el Partido de San Miguel, donde uno de los referentes libertarios, Agustín Alomo, más conocido como ”el gordo Dan”, intenta posicionar un discurso y simbología con alarmantes semejanzas al Partido Nacional Fascista de los años 30. El nuevo conjunto libertario, denominado ”Las Fuerzas del Cielo”, se autoconvocó para reivindicar lemas como la ”propiedad”, ”Dios”, ”vida”, ”libertad”, ”patria” y ”familia”, en debates relativos a otros siglos, alejados de la actualidad.
Con un aire de entusiasmo y la peculiar ventaja que da la ignorancia, un centenar de jóvenes, en su mayoría menores de 30 años, se congregaron en la Sociedad Italiana de San Miguel para lo que denominaron un “evento histórico”. En realidad, se trató de la presentación privada de “Las Fuerzas del Cielo”, una nueva agrupación compuesta por referentes libertarios del ámbito digital que buscan visibilidad con la intención de asegurar un lugar en las listas de La Libertad Avanza para 2025. Su estrategia: recurrir a la provocación. El evento, cargado de simbolismo, replicó la estética del Partido Nacional Fascista de los años 30, un guiño que ellos mismos celebraron abiertamente en redes sociales.
En el escenario, una bandera proclamaba: “Argentina será el faro que ilumina el mundo”, flanqueada por lemas como “Dios”, “libertad”, “propiedad”, “vida”, “patria” y “familia”. La ambientación, diseñada para evocar la Italia de Mussolini, parecía más una caricatura que una recreación histórica, especialmente porque muchos de los asistentes no captaron la referencia, prefiriendo cantar una melodía creada por inteligencia artificial en la previa.
Una locación cargada de simbolismo fascista
La elección de San Miguel no fue casual. Cuna de Aldo Rico, ahora la localidad es el bastión de Agustín Romo, diputado bonaerense de La Libertad Avanza. Romo, a pesar de su discurso antiestatista, recurrió a recursos del Estado para movilizar a su base, utilizando contactos en Trenes Argentinos, una compañía que el Gobierno pretende privatizar. Fue uno de los últimos en hablar, destacándose también el “Galleguito” Álvarez, conocido por liderar campañas contra las universidades. El acto, al que solo se podía acceder con invitación, dejó en evidencia la escasa diversidad: cerca del 90% de los asistentes eran hombres, una realidad que no pasó desapercibida incluso dentro del espacio político.
Invitado especial: Agustín Laje
La presencia estelar de Agustín Laje, figura clave de la batalla cultural promovida por el espacio, marcó uno de los puntos álgidos del evento. En un tono más combativo que intelectual, Laje repitió descalificaciones similares a las que suele utilizar Javier Milei contra periodistas y economistas, y llamó a imponer “la hegemonía de la libertad”. Asimismo, advirtió contra el peligro de repetir la experiencia chilena, donde los jóvenes cuestionaron el modelo neoliberal en las protestas de 2019.
Un cierre sin sorpresas
El acto concluyó con el ya clásico grito de “¡Viva la libertad, carajo!” seguido por adaptaciones libertarias de temas que pertenecen al cancionero peronista. A pesar de los esfuerzos por enmarcar el encuentro como “histórico”, el evento dejó más preguntas que certezas sobre el futuro de esta agrupación y sus métodos para influir en la política argentina.
