En medio de una semana tumultuosa, el presidente Milei destituye a Guillermo Ferraro, su Ministro de Infraestructura. Se lo acusa de hacer trascender en los medios la frase del presidente sobre “fundir a las provincias” si los gobernadores no le aseguraban los votos de la Ley Ómnibus.
El rumor comenzó a circular durante la tarde y se confirmó por la noche. En medio de la peor semana política para el gobierno de Javier Milei, el presidente despidió a su ministro de Infraestructura, Guillermo Ferraro, acusándolo de filtrar “información reservada del gobierno” a los medios de comunicación.
Al cierre de esta edición, se rumoreaba que el Ministerio de Infraestructura sería reestructurado como una secretaría y pasaría a formar parte del Ministerio de Economía liderado por Luis Caputo.
Lo que Milei llamó “información reservada del gobierno” parece ser simplemente una frase suya pronunciada durante la reunión de gabinete de ese jueves por la mañana, cuando un enfurecido presidente amenazó con “arruinar a las provincias” si los legisladores afines a ciertos gobernadores no respaldaban la Ley Ómnibus en el Congreso.
“Los dejaré sin recursos, los arruinaré a todos”, se filtró que Milei dijo señalando a los gobernadores, menos de 24 horas después de que el ministro de Economía, Luis Caputo, también causara malestar entre los mandatarios provinciales al amenazar con “ajustar todas las asignaciones provinciales de coparticipación de inmediato si alguno de los aspectos económicos de la Ley de ‘Bases’ es rechazado”.
Lo más destacado, que evidencia la falta de habilidad política del gobierno y su clara inexperiencia, es que la justificación para despedir al ministro es la repercusión pública de la peligrosa frase de Milei, que contiene un mensaje profundamente antidemocrático, en lugar de refutar de manera categórica las palabras del presidente, que también provocaron la reacción de gobernadores aliados como Maximiliano Pullaro de Santa Fe y Rogelio Frigerio de Entre Ríos, quienes advirtieron que no se dejarían “intimidar por las tácticas coercitivas del gobierno”.
El clima tenso que se vivió en la reunión de gabinete se reflejó en el anuncio del vocero Manuel Adorni sobre el pedido al procurador Eduardo Casal para establecer una fiscalía que investigue la corrupción de funcionarios “a nivel nacional y provincial”, aunque en realidad esta fiscalía existe desde 1960 y se llama Procuración de Investigaciones Administrativas.
“La fiscalía es un mensaje para los gobernadores, indicando que el objetivo es el déficit cero. Se investigará a todos para recuperar lo robado. Fue idea del presidente”, confió a Tiempo una fuente cercana a las negociaciones con oficina en la planta baja de la Casa Rosada.
Guillermo Ferraro es un empresario que colaboraba desde hace tiempo con Javier Milei. Estaba a cargo del Ministerio de Infraestructura, que ahora incluye transporte, obras públicas, minería y comunicaciones. Su última aparición fue en la Cámara de Diputados defendiendo la ley ómnibus en lo relacionado con sus áreas.