Después de la condena, Cristina recibió un respaldo amplio y transversal. Surgieron críticas hacia el Poder Judicial y denuncias sobre manipulación mediática.
La respuesta al fallo que busca proscribir a Cristina Kirchner no se hizo esperar. A medida que avanzaban las horas, el respaldo hacia la exmandataria creció desde diversos sectores políticos, sociales y sindicales de todo el país, luego de que la sentencia fuera pronunciada por los jueces de Casación. El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, expresó su rechazo en redes sociales, señalando que se trató de “un juicio armado por el Partido Judicial sin pruebas, con una condena anticipada y anunciada por un periodismo cómplice”. “Toda nuestra solidaridad y apoyo a CFK”, agregó Kicillof, quien ya se había pronunciado el lunes en su conferencia de prensa semanal, denunciando la persecución judicial.
El jefe del bloque de Unión por la Patria (UxP) en la Cámara de Diputados, Germán Martínez, calificó el fallo como “otro paso en una causa totalmente armada” y sostuvo que “sectores del Poder Judicial y económico buscan disciplinar a la política para que no defienda los intereses de los argentinos, sino que se ajuste al proyecto de país de Javier Milei”. La diputada Cecilia Moreau también criticó la sentencia y expresó su apoyo a Cristina Kirchner, señalando que intentan “apartarla porque fue la única dirigente en democracia que amplió derechos, soberanía, libertad e igualdad para los argentinos”.
Por su parte, el senador Eduardo “Wado” de Pedro comparó la situación de Cristina con la persecución judicial que enfrentó el presidente de Brasil, Luiz Inácio “Lula” da Silva. “Así como en Brasil persiguieron a Lula para proscribirlo, hoy la mafia judicial lo hace con Cristina. Pero la verdad y los pueblos siempre triunfan”, afirmó De Pedro, compartiendo en sus redes un comunicado de solidaridad del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil y un mensaje con la frase “el amor no se puede proscribir”. También el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, expresó su repudio y dijo que “solo buscan estigmatizarla y perseguirla”.
Natalia Zaracho, diputada nacional de Patria Grande, rechazó el fallo y afirmó: “Esto no es justicia, es el partido judicial aliado con el poder económico y los vendepatria en la Casa Rosada”. Juan Grabois, referente de Patria Grande, organizó una clase pública frente a los tribunales de Comodoro Py sobre la guerra legal contra la exmandataria. “Si permitimos que la injusticia se naturalice en los tribunales, la injusticia social también se volverá normal”, advirtió Grabois.
José Mayans, senador y vicepresidente del Partido Justicialista (PJ), respaldó a Cristina Kirchner y sostuvo que “quieren proscribirla porque temen que vuelva a ser presidenta”. El legislador aseguró que “es una figura importante para el pueblo argentino, y eso les preocupa”. Luego de una reunión en el Instituto Patria, Mayans comparó el caso de Cristina con el de Lula, señalando que “en Brasil lo encarcelaron injustamente y hoy es presidente nuevamente”.
El diputado nacional Hugo Yasky, de la CTA, criticó al Poder Judicial, al que acusó de “encubrir los delitos de Macri mientras condena a CFK por supuestos actos de corrupción sin pruebas”.
Desde el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), Myriam Bregman denunció la “manipulación mediática y judicial” en la causa y advirtió sobre la gravedad de la sentencia contra CFK. “Es un fallo que limita la democracia, pues deja en manos de los jueces la decisión de quién puede ser candidato”, afirmó Bregman. “Debemos repudiar todo avance antidemocrático, especialmente cuando los métodos no buscan investigar la corrupción de manera real”, concluyó.