Una multitud se movilizó contra las declaraciones homofóbicas de Javier Milei en Davos, exigiendo respeto por las libertades individuales y criticando el desfinanciamiento de políticas de género. La marcha, diversa y heterogénea, incluyó a jóvenes, familias y activistas, y reflejó el rechazo al discurso del gobierno sobre los derechos LGBTIQ+.
Una gran cantidad de personas se movilizó en protesta contra las declaraciones homofóbicas de Javier Milei en Davos, exigiendo el respeto a las libertades individuales. Además, se alzaron críticas hacia el Gobierno por el desfinanciamiento de políticas de género.
La marcha, que se desarrolló cerca del Congreso, comenzó con una joven que sostenía un cartel que decía “Nunca Musk”, imitando la tipografía del informe de la CONADEP. A su alrededor, la multitud hizo sonar cencerros y lanzó un aplauso que rápidamente se transformó en un cántico: “Milei basura, vos sos la dictadura”.
La composición de la movilización fue diversa, recordando a las primeras marchas en defensa de la universidad pública. Participaron partidos políticos, pero también activistas, familias con niños, muchos jóvenes y adultos mayores. “Es un discurso de odio, es muy peligroso. Conozco a varios que se arrepienten de haber votado a Milei. No lo veían venir”, comentó Victoria, de 18 años, que llegó con amigas desde Paso del Rey.
Entre los manifestantes se destacaron columnas del peronismo y la izquierda, que llegaron hasta la Plaza de Mayo por Hipólito Yrigoyen y Avenida de Mayo. Los que marchaban por el lado de los números impares se beneficiaron de la sombra de los árboles para combatir el calor. La Cámpora, el Frente Renovador, el Partido Obrero, y el PTS tuvieron una presencia destacada.
“Es muy importante para los argentinos poder mostrarnos libremente y que nadie nos diga cómo expresar nuestra identidad, sin importar a qué partido político pertenezcamos”, señaló Juan Aguirre, de 23 años.
A pocos metros de allí, dos chicas portaban gorras rosas con el mensaje “Make Argentina Gay Again”. Una de ellas, Francesca, explicó las razones que la trajeron a la Plaza de los Dos Congresos: “Me acosté en un país y desperté en los ‘70”, dijo.
Francesca, de 39 años y trans, compartió su experiencia: “Ya superé la expectativa de vida del colectivo, que es de 30 años. Después de mucho esfuerzo conseguimos la identidad de género y el cupo laboral, pero ahora empiezan a recortar los medicamentos para el VIH, fundamentales para algunas de nosotras”.
“Pedimos trabajo digno como cualquiera. Yo soy estudiante de Ciencias de la Comunicación y no quiero seguir en la prostitución cuando termine la carrera”, agregó Francesca.
A diferencia de otras marchas, los referentes políticos se mezclaron entre la multitud sin protagonizar la movilización. Además, la presencia de fuerzas de seguridad fue discreta, limitándose a ordenar el tránsito.
“Hay que apoyar las libertades y los derechos”, expresó Bianca, de 15 años, quien participó de la marcha con su familia. “Sobre los derechos no se vuelve”, concluyó, mientras se protegía del calor con un abanico con los colores del arco iris.