El directorio del Fondo aprobó la revisión, elogiando el ajuste fiscal y la flexibilización cambiaria; advirtió a la oposición sobre la necesidad de financiar completamente cualquier nueva iniciativa que se promueva en el Congreso.
El directorio del Fondo Monetario Internacional aprobó la primera revisión del programa de facilidades extendidas firmado con el gobierno de Javier Milei y autorizó un desembolso inmediato de 1.529 millones de Derechos Especiales de Giro (DEG), equivalentes a cerca de 2.000 millones de dólares.
Aunque el gobierno no cumplió con la acumulación de reservas comprometida en el acuerdo, el FMI valoró la continuidad del ajuste fiscal y la flexibilización del régimen cambiario mediante bandas de flotación. También influyó el apoyo implícito de Estados Unidos al alineamiento del Ejecutivo.
La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, indicó que el programa de estabilización había comenzado con solidez pese a un contexto externo complejo. Destacó la reanudación de la desinflación y afirmó que «la economía ha continuado su expansión y la pobreza ha seguido disminuyendo». Mencionó, también, que la Argentina recuperó acceso a los mercados internacionales antes de lo previsto, aunque con diferenciales de riesgo aún elevados.
Georgieva subrayó la importancia de preservar la flexibilidad cambiaria y mantener los esfuerzos para reconstruir las reservas internacionales. También pidió que cualquier nueva iniciativa tributaria o de gasto cuente con financiación completa, un mensaje dirigido especialmente a la oposición que busca incentivar medidas como el aumento a jubilados, la declaración de emergencia pediátrica y la asignación automática de fondos a provincias.
Con este nuevo desembolso, el gobierno habría recibido cerca del 70% del préstamo total, que asciende a 20.000 millones de dólares. Sin embargo, una parte importante de los fondos se destinará al pago de intereses, incluidos los derivados de créditos refinanciados en gestiones anteriores, reflejando la compleja relación financiera entre Argentina y el FMI.