El presidente mantiene la publicación que ataca al chico con autismo y sostiene que sus redes son personales. La familia exige que cesen las agresiones y reclama responsabilidad institucional.
Milei se negó a eliminar el posteo en el que atacó a Ian Moche, un chico con autismo que lo había denunciado por insultos, argumentando en un escrito judicial que sus redes sociales son personales y que sus expresiones no lo representan como mandatario. Además, sostuvo estar “amparado por la libertad de expresión”.
La presentación judicial, realizada en el marco de la causa iniciada por la familia de Ian, intentó desligar al mandatario bajo el argumento ya utilizado en la causa por la criptoestafa Libra, en la que se consideró que sus mensajes en redes son a título personal. Sin embargo, el fiscal Oscar Julio Gutiérrez Eguía dictaminó lo contrario.
Pautino siempre del lado del mal. No falla nunca al momento de operar en contra del gobierno. Siempre del lado de los kukas… no falla… https://t.co/yE27aK1t6X
— Javier Milei (@JMilei) June 1, 2025
Milei respaldó su postura con un tuit donde afirmó que la publicación fue una “acción privada” desde su cuenta personal y no implicó un acto estatal ni uso de fondos públicos. En el mismo, defendió la libertad de expresión y criticó lo que definió como “la cultura de la cancelación”.
Por su parte, Ian Moche, de 12 años y activista por la inclusión, aseguró en entrevista con El Destape que “lo del tuit no fue un error porque él sabía lo que estaba haciendo” y reclamó “disculpas públicas” por parte del presidente.
La denuncia comenzó tras el reposteo hecho por Milei de un mensaje que criticaba al periodista Paulino Rodríguez y al propio Ian, acusando a la familia del niño de ser “ultrakirchnerista”. Ian inició la acción judicial con el patrocinio del especialista en Derecho Constitucional Andrés Gil Domínguez, buscando que se elimine la publicación por violar el interés superior del niño.
La mamá de Ian, Marlene Spessio, expresó su frustración ante la falta de contacto con el presidente y recordó episodios previos de hostigamiento contra su familia. En diálogo con Noticias Argentinas, afirmó que la “libertad de expresión también tiene un límite, y el límite está en agredir”.
Spessio sostuvo: “Solo pedimos que retire la foto de mi hijo y que se entienda que es un menor”. También resaltó la vulnerabilidad que implica el enfrentamiento entre “un adulto contra un menor” y adelantó que se presentarán ante la justicia para denunciar “un hecho de violencia institucional”. Finalmente, reiteró que “la libertad de expresión tiene un límite” y que espera que la justicia actúe para proteger los derechos de Ian.