Las organizaciones ambientalistas alertan que la medida “tendrá graves consecuencias para Argentina”. Esto se da en un contexto internacional influenciado por la reciente victoria de Trump en los Estados Unidos.
A poco más de una semana de la victoria de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos, el presidente Javier Milei dio un golpe final a la posición tradicional de Argentina respecto a la mitigación del cambio climático, ordenando un cambio en las negociaciones internacionales del país. En las últimas horas, el mandatario, que en varias ocasiones ha cuestionado el cambio climático, solicitó el retorno al país de los funcionarios de Cancillería y la Subsecretaría de Ambiente que se encontraban en Bakú, Azerbaiyán, para asistir a la cumbre climática de la ONU (COP29). Grupos ambientalistas calificaron la medida como “sin precedentes”. Tras años de participación en estas negociaciones, Argentina se retira precisamente en el año en que se abordaría el financiamiento climático.
“Es una decisión inédita que marca un cambio de dirección en la postura internacional de Argentina. El país siempre fue activo y propositivo en estas negociaciones. Este cambio no será inocuo; tendrá implicancias importantes para Argentina”, expresó la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN). Este medio intentó contactar a la Subsecretaría de Ambiente para obtener una explicación sobre la decisión, pero no obtuvo respuesta.
La decisión de Milei viola al menos ocho acuerdos internacionales firmados por Argentina, incluido el Acuerdo de París y el Protocolo de Kioto, ambos orientados a la reducción de emisiones. “Es sumamente grave, ya que Argentina no estará representada en una COP donde se discutirá especialmente el financiamiento climático”, advirtió Mercedes Pombo de Jóvenes por el Clima.
El distanciamiento de la postura ambientalista argentina también coincide con un ajuste presupuestario importante. El proyecto de Presupuesto 2025 enviado al Congreso asigna apenas un 0,066% para combatir la crisis climática. Tanto la ex Secretaría, ahora Subsecretaría, de Ambiente como la Administración de Parques Nacionales enfrentan una reducción de presupuesto que va del 12,25% al 25%, considerando la inflación proyectada por el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) para 2025.
Debates en Bakú
En la COP29, cerca de 200 países endurecieron el borrador del acuerdo sobre financiamiento para la lucha contra el cambio climático. Este texto, de 34 páginas, recoge las distintas posiciones y estipula la transferencia de fondos adicionales a los países más afectados por el calentamiento global. En comparación con el objetivo de 100.000 millones de dólares anuales fijado en 2009, algunos participantes abogan por incrementar ese monto hasta diez veces.
“El nuevo texto incluye propuestas concretas para alcanzar un acuerdo sobre el financiamiento, con objetivos específicos para los países más vulnerables”, explicó Friederike Röder, de la ONG Global Citizen.
La Convención de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CNUCC), adoptada en 1992, designó a los países históricamente responsables de las emisiones —como Estados Unidos, la Unión Europea, Japón, entre otros— como proveedores de ayuda financiera. En 2009, estos países se comprometieron a entregar 100.000 millones de dólares anuales hasta 2025, un objetivo que no alcanzaron hasta la fecha, generando tensiones entre el Norte y el Sur global.
Durante la COP29, los firmantes del Acuerdo de París deben definir un nuevo objetivo de financiamiento post-2025. India propuso un billón de dólares anuales, una cifra que los países ricos consideran excesiva, señalando que representan solo el 30% de las emisiones históricas y sugiriendo que China y los Estados del Golfo también deberían contribuir.