El gobierno de Axel Kicillof envía vehículos, drones y 400 policías de fuerzas especiales a Santa Fe, mientras planea establecer una base operativa en San Nicolás para combatir el narcotráfico y prevenir la propagación de la violencia en la región.
Después de una ola de crímenes y atentados en Rosario, el gobierno de Axel Kicillof ha decidido ofrecer ayuda a la provincia de Santa Fe mediante el envío de vehículos, drones y 400 policías de fuerzas especiales para intensificar la lucha contra el narcotráfico. Además, se planea establecer una base operativa en San Nicolás para reforzar los controles.
El ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, confirmó el envío de esta ayuda luego de que Kicillof se comunicara con su homólogo santafesino, Maximiliano Pullaro, durante el fin de semana para expresar su apoyo.
Alonso detalló que enviarán 400 efectivos de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI), 80 patrulleros, drones, motos de alta cilindrada y 3 minibuses a Rosario. Además, se contempla una segunda fase que podría incluir aviones no tripulados y helicópteros para brindar apoyo aéreo a las fuerzas federales.
Con respecto a la instalación de una base operativa en San Nicolás, Alonso explicó que esta medida busca fortalecer los controles en el norte de la provincia y prevenir que la situación en Rosario tenga repercusiones en Buenos Aires y la región circundante.
Alonso señaló que la provincia de Buenos Aires ofrece estos recursos a Santa Fe por solidaridad, pero también por autodefensa, ya que la situación en Rosario afecta a varias provincias. Destacó la importancia de contar con suficientes recursos y estrategias integradas para combatir la delincuencia de manera efectiva.
Además, el ministro mencionó una reunión con la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, junto al senador provincial Sergio Berni, destacando la importancia de dejar de lado las diferencias ideológicas y trabajar en conjunto para enfrentar la grave situación en Rosario.
