Según el relevamiento mensual de CAME, las ventas de los comercios pequeños y medianos retrocedieron un 9,1% frente a octubre. También cayeron 4,1% en la comparación interanual y seis de los siete rubros evaluados mostraron descensos.
Las ventas minoristas de las pymes comerciales atravesaron en noviembre un retroceso abrupto. La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) informó que la facturación se ubicó 9,1% por debajo de octubre, lo que confirma el freno del consumo tras las compras extraordinarias previas a las elecciones. En la comparación con noviembre de 2024, CAME registró una baja de 4,1%, un dato que muestra que la demanda no encuentra un punto de rebote. Aun así, el acumulado anual conserva un incremento de 3,4%, producto del impulso registrado en los primeros meses del año, ahora completamente absorbido por la recesión.
El informe incluye una encuesta entre comercios del sector. Allí, el 54,2% declaró que la situación se mantuvo estable en relación con un año atrás, mientras que el 37% afirmó que las condiciones empeoraron, un número que subió cuatro puntos respecto de octubre. La percepción general de mejora que algunos negocios registraron ese mes estuvo ligada a la compra anticipada de bienes ante el temor a un salto de precios tras los comicios del 26 de octubre, una conducta que desfiguró el nivel de ventas habitual y que luego no volvió a repetirse.
Con el regreso a una demanda más contenida en noviembre, las operaciones comerciales quedaron por debajo no solo del mes anterior, sino también del registro del año pasado. CAME remarcó que seis de los siete rubros relevados mostraron caídas, en una continuidad del deterioro que la entidad viene señalando desde hace meses. Perfumería (-17%), Bazar y decoración (-9,7%) y Alimentos y bebidas (-5,9%) encabezaron los retrocesos. La única excepción se dio en Farmacia, que mostró una suba interanual de 1,8%.
Según la entidad, noviembre consolidó un “escenario de consumo dual”, definido por hogares con fuerte restricción presupuestaria y menores opciones de financiación. En ese marco, la distancia entre las compras esenciales y los bienes no indispensables se amplió todavía más, dejando a buena parte del comercio pyme frente a un panorama de ventas menguantes y una temporada de fin de año sin señales claras de recuperación.
