Se estima entre el 25% y 35%, en medio de un panorama inflacionario. Las consultoras privadas anticipan cifras alarmantes y se proyecta una inercia significativa para el próximo año.
El jueves próximo, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) revelará la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de diciembre pasado, estimado por fuentes privadas entre el 25% y el 30%. De confirmarse este porcentaje, la inflación acumulada del año superaría el 200%, una cifra de tres dígitos no vista desde la hiperinflación de 1990. Hasta noviembre, último mes bajo el gobierno de Alberto Fernández, la inflación interanual ya había alcanzado un aumento del 160.9%, según datos del Indec.
El martes pasado, el portavoz presidencial Manuel Adorni aseguró que el Gobierno está implementando un “plan para estabilizar” la economía. En medio de aumentos generalizados en diversos sectores, Adorni advirtió sobre la complejidad de salir de la “encerrona inflacionaria”, destacando el trabajo en el equilibrio de las cuentas y el saneamiento del Banco Central.
Desde el sector privado, la consultora Eco Go estimó la inflación de diciembre en un 29.4%, con un aumento interanual del 222.8%. La subida, impulsada principalmente por el aumento del 35.5% en los alimentos, fue contrarrestada por una disminución en el precio de la carne hacia el final del mes. Otras estimaciones, como las de la consultora LCG y el IPC de la Fundación Libertad y Progreso, también reflejan aumentos significativos.
A pesar de la desaceleración reciente, las subidas de precios de diciembre generan una inercia importante para enero, exacerbada por anuncios de incrementos en tarifas de transporte, peajes y prepagas. La expectativa de inflación para los próximos 12 meses aumentó considerablemente en diciembre, según un informe de la Universidad Torcuato di Tella, alcanzando el 225.9%. Este aumento se registró después de la asunción de Javier Milei a la presidencia.