El consumo cae al nivel más bajo desde 2001 y el empleo se desploma con el cierre de casi 400 mil cuentas sueldo. El desempleo aumenta significativamente, afectando especialmente a la provincia de Buenos Aires, mientras pequeñas y medianas empresas prevén más suspensiones y despidos.
La recesión, que aún no muestra señales de haber tocado fondo, ha reducido el consumo a su nivel más bajo desde 2001 y está causando una severa caída del empleo, con casi 400 mil cuentas sueldo cerradas: 340 mil en el primer cuatrimestre y otras 60 mil entre mayo y junio, según fuentes del sistema financiero.
De acuerdo con el INDEC, el desempleo aumentó del 5,7% en el cuarto trimestre de 2023 al 7,7% en el primero de este año, sumando 405.000 desocupados en los primeros tres meses de 2024.
A nivel provincial, Santa Fe ha perdido unos 10 mil empleos formales desde finales del año pasado.
Según un informe de Industriales Pymes Argentinos (IPA), las pequeñas y medianas empresas prevén más suspensiones y despidos, con un recorte estimado de 300.000 empleos en 2024. La mayoría de los trabajadores afectados se encuentran en la provincia de Buenos Aires, que ha sufrido el impacto de la crisis económica semana tras semana.
El consumo sigue golpeado por la recesión y la pérdida de poder adquisitivo, con una caída del 7,7% en mayo, según la Cámara de Comercio y Servicios (CAC). Las categorías más afectadas son Recreación y cultura, con una caída de casi 43%, e Indumentaria y calzado, con un descenso del 27%.
Proyecciones de la consultora C&T indican que la economía podría caer más del 4% este año y la inflación podría llegar al 5% en junio.
