Un informe de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y el Conicet revela el fuerte impacto que el aumento de tarifas de servicios públicos está teniendo en los hogares del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
Según el estudio del Observatorio de Tarifas y Subsidios del Instituto Interdisciplinario de Economía Política de la Facultad de Ciencias Económicas, cubrir la demanda energética, de agua potable y de transporte de una familia promedio en el AMBA costó $146.641 en marzo, un incremento del 429% en comparación con diciembre de 2023, en un escenario sin subsidios.
El informe también destaca un aumento del 7,7% en el costo de esta canasta básica de servicios públicos entre febrero y marzo, lo que anticipa una fuerte presión sobre el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del mes en curso, según lo proyectado por consultoras privadas.
Este incremento mensual se suma a una suba acumulada del 133% desde diciembre de 2023, superando ampliamente la variación general de los precios minoristas. En la comparación interanual con marzo de 2024, el aumento fue del 92%, también por encima de la inflación general del período (54%).
El informe detalla el aumento específico de cada servicio: el gas natural registró un incremento del 537% interanual, el agua un 330%, la energía eléctrica un 46% y el transporte un 45%.
Este aumento de tarifas se produce en un contexto en el que la inflación general, medida por el INDEC, muestra una tendencia descendente tras el salto registrado luego de la devaluación de diciembre de 2023. Sin embargo, aunque el gobierno destaca esta desaceleración inflacionaria como un logro de su política económica, la metodología del INDEC para calcular el IPC es objeto de críticas, ya que se argumenta que otorga mayor peso a la variación de precios de alimentos y menor a la de servicios públicos y transporte, que son los que más han aumentado.
El informe del Observatorio también analiza el peso de los servicios públicos en el presupuesto de los hogares, señalando que en marzo, la canasta de servicios públicos representó el 11,3% del salario promedio, mientras que el costo del transporte público se llevó el 41% del gasto total en servicios públicos, lo que evidencia la carga que estos aumentos representan para las familias del AMBA.