Según un análisis de ASAP, electricidad y transporte son los dos rubros más afectados.
En el marco de un fuerte ajuste fiscal, el Gobierno Nacional continúa implementando un significativo recorte de subsidios económicos en 2025. Según un análisis reciente, la reducción de este tipo de gasto alcanzó el 50% en términos reales durante los dos primeros meses del año.
Esta medida se inscribe en el plan motosierra que lleva adelante la administración de Javier Milei para alcanzar el equilibrio fiscal y controlar la inflación, sin importar su impacto en la sociedad y la actividad económica.
Este dato surge del informe realizado por la Asociación Argentina del Presupuesto y las Finanzas Públicas (ASAP) que, de acuerdo al relevamiento, la baja de los subsidios, que se concentra en las ayudas para electricidad y para el transporte, tiene como contrapartida el incremento de las tarifas y los pasajes.
El estudio indica que en febrero, el total de los subsidios económicos decreció en 67,7% ajustado por inflación, de manera que acumula en el bimestre una baja del 49,8% descontado el efecto del IPC respecto de igual período del 2024.
Los subsidios energéticos cayeron en febrero 79,1% respecto de igual mes del año pasado, de manera que acumulan una contracción del 52,4%. En tanto, las ayudas para el transporte en febrero bajaron 44,1% y sumaron una retracción de 50,2% en los dos primeros meses.
“Durante febrero 2025, en concepto de Subsidios Energéticos se transfirieron solamente $60.000 millones a la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (CAMMESA), implicando una variación interanual de -74,3%”, indica el reporte privado.
En ese sentido, ASAP aclara que “como viene sucediendo desde octubre 2024, el nivel de este concepto es considerablemente menor respecto de lo observado entre febrero y septiembre del año anterior (promedio mensual mayor a $350.000 millones)”.
Por otro lado, el estudio revela que “durante febrero no se registraron transferencias corrientes a Energía Argentina SA (ENARSA)”. El resto corresponde a transferencias al Ente Binacional Yacyretá ($25.000 millones) y transferencias en el marco del Plan Gas IV ($17.946 millones), que muestran una variación positiva de 196,2% interanual ajustado por inflación.
“En términos acumulados, los Subsidios Energéticos consolidan una caída de 52,4% motivada por la nula ejecución de las transferencias a ENARSA, y la baja ejecución de las destinadas a CAMMESA, en comparación con 2024”, explica el informe.
Respecto a las transferencias al transporte automotor y ferroviario, se destacan una baja del 28,7% a Operadores Ferroviarios y del 56,5% de las destinadas al Fondo Fiduciario del Sistema de Infraestructura del Transporte.