A siete meses gestión de Milei, la inflación disminuye sin que se haya registrado una mejora en la capacidad de compra. La insatisfacción con las políticas económicas crece. Sin embargo, Milei mantiene una imagen positiva considerable, mientras que su gabinete se beneficia de un menor escrutinio público.
Las encuestas de las principales consultoras muestran que, a siete meses de la gestión de Javier Milei, la preocupación principal de la sociedad ha cambiado de la inflación al desempleo y la crisis económica.
La elección de Milei sobre Sergio Massa en el balotaje del 19 de noviembre expuso el cansancio de una sociedad golpeada por casi una década de crisis. En este contexto, la mayoría electoral confió en un candidato que prometía combatir la inflación y se presentaba como un experto en “crecimiento económico con o sin dinero”, una promesa que aún no ha cumplido.
Federico Aurelio, director de la consultora Aresco-Aurelio, destaca que, a pesar del cambio de gobierno y las promesas de mejora, la preocupación principal sigue siendo la economía. “Con la baja de la inflación en los últimos meses, los problemas de empleo han ganado más relevancia, ya que se percibe una mejora en los precios, pero un empeoramiento en el empleo”, explica el analista.
El último sondeo de Opinaia muestra que la preocupación por la posibilidad de perder el empleo creció ocho puntos porcentuales en junio, alcanzando el 37%. Le siguen la preocupación por la inflación (29%) y la corrupción (22%).
Según el informe de Zuban Córdoba, el 55,8% de los encuestados está en desacuerdo con la política económica de Milei. Paola Zuban, directora de la consultora, advierte: “La confianza en el plan económico se mide en expectativas, pero también en la realidad material de las personas. Casi el 50% dice que no puede esperar más”.
El primer índice inflacionario de Milei tras su llegada a la presidencia fue un preocupante 25,5%, resultado de una devaluación del 52% anunciada por Caputo. Aunque los precios al consumidor han disminuido desde entonces, no se ha registrado una mejora en la capacidad de compra. Un estudio del CIFRA de la CTA muestra que el haber mínimo ha perdido el 32,1% de su poder de compra real desde noviembre de 2023.
Zuban observa cambios en los hábitos económicos de las clases medias y bajas. “Más del 70% cree que su economía personal ha empeorado desde que Milei es presidente y que los salarios no están ganando a la inflación. La desigualdad ha aumentado en estos siete meses, y entre el 60% y el 80% ha tenido que recortar gastos en esparcimiento, alimentación, transporte y vestimenta”, explica.
A pesar de estos datos, las expectativas siguen polarizadas. “Aunque hay preocupación por el rumbo económico, un alto porcentaje cree que el gobierno le da importancia a bajar la inflación, mejorar el ingreso y reducir la pobreza”, señala Zuban.
Las encuestadoras destacan que Milei aún conserva entre un 50% y un 55% de imagen positiva. Según la socióloga Analía del Franco, esto se debe a que el gobierno aún está en la etapa del “sacrificio”, un concepto promovido por Milei desde su elección. “La gente se está adaptando al ajuste, y aunque reducen el consumo, ven que la inflación está bajando, lo que construye una imagen positiva del ajuste”, explica.
Sin embargo, este apoyo no se refleja en todo el gabinete de Milei. A diferencia de la gestión de Alberto Fernández, donde los ministros estaban bajo constante escrutinio, los funcionarios de Milei pasan desapercibidos, lo que les permite mantener una imagen positiva.
El informe de Equipo Mide indica que la vicepresidenta, Victoria Villarruel, tiene un 50% de imagen positiva, igual que Milei. Le sigue la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, con un 47% de aceptación. Luis Caputo y Luis Petri tienen un 38% y 36% respectivamente, al igual que el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, la titular de Capital Humano, Sandra Pettovello, y la canciller Diana Mondino.
Federico Aurelio explica que estos índices positivos se deben al apoyo general al presidente. “Todos los integrantes del gobierno tienen hoy un saldo favorable porque son parte de un gobierno con un buen acompañamiento”, analiza.
Diego Reynoso, analista político y profesor de la Universidad de San Andrés, argumenta que la crisis económica no se refleja completamente en las encuestas debido a la esperanza de la gente en el plan del gobierno. “La gente tiene más esperanza que confianza. Necesitan creer que les irá bien, aunque no estén seguros de que esta es la forma correcta”, concluye Reynoso.